sábado, 28 de febrero de 2009

Mozart, Haydn y Mendelssohn fueron interpretados en su tercer concierto de temporada 2009 de la OSSLP


Por: Roberto A. Valenciano Capín.


Una noche de viernes de concierto de la OSSLP al quedar impregnada por la majestuosidad musical de tres grandes compositores de todos los tiempos; Mendelssohn, Haydn y Mozart, bajo la batuta de su director general y artístico, Mtro. José Miramontes Zapata y tener como escenario el Coloso de Villerías.


Un acierto fue el presentarnos un programa sustentado en la decantación musical bajo el sostenuto de una de sus voces, los alientos, al contar con la presencia del cuarteto de alientos madera de la propia OSSLP, para interpretar la Sinfonía concertante para alientos K. AANH.9/297B de Wolfgang Amadeus Mozart y complementar el programa con la Obertura " La trompeta" en Do Mayor, Opus 101 de Félix Mendelssohn-Bartoldy y la Sinfonía No. 104 en Re Mayor "Londres" de Franz Joseph Haydn.


Tres tempos musicales muy puntuales y didácticos, en los cuales se pudo apreciar la majestuosidad, la sobriedad, la creatividad y el tránsito entre lo real y lo espiritual de estos genios creativos, además conmemorar los 200 años del natalicio de Mendelssohn- Bartoldy, así ser parte de la celebración del Año Haydn.


Ante una noche algo cálida fue partícipe de abrir este tercer concierto de su temporada 2009, con una obra que queda de manifiesto el talento del compositor alemán Mendelsson-Bartholdy, con su Obertura en Do Mayor al quedar plasmada toda la vitalidad creativa en una obra realizada en su plena madurez, sin hacer dejo de ciertas reminicencias a lo imperial y lo festivo, al destacarse por su brillo, contundencia, una claridad y fluidez en las diferentes variantes tímbricas y tonales de este compositor consagrado y triunfador.


Al ser considerado Haydn como un autor prolífico y una de las figuras más influyentes en el desarrollo de la música del Clasicismo, en esta edición nos presenta la OSSLP la última sinfónía de su larga vida compositiva del músico austríaco. Trazada en Adagio-Allegro, Andante,Menuetto-Allegro y Finale-Spirituoso. Se destaca esta sinfonía por los estadios animosos, festivos y solemnes, pero queda enfatizado su transitar del tiento drámatico a lo humorístico, claro sin olvidar las melodías de corte popular, como ocurre con las contradanzas autríacas presentes en el tercer movimiento. La OSSLP se escucho sobria, concisa y muy fluída a pesar de un cierre de la obra en que muchos de los escuchas nos quedamos con el hálito en suspense por un remate flojo de terminar ésta y quedarnos a deber la contundencia conque terninan las obras.

No solamente se caracteríza por la perseverancia y convicción de la obra misma emanada del gran genio alemán, W. A. Mozart, sino conlleva un aderezo muy especial como es la participación de cuatro solista que conforman el cuarteto de alientos de madera de la OSSLP; Rodolfo Muñoz Arcos en el oboe, Leopoldo Márquez Flores en el clarinete, Stanilav Kotov en el fagot y Rogelio Macías Ávila en el corno, en el acierto de proponer y disfrutar de una obra llena de una fabulosa riqueza en combinaciones instrumentales, así como ser una extraordinaria congratulación hacia este revolucionario compositor.

La verdad es que me cundió cierto nerviosismo con ansias en esta segunda parte de cómo le resultaría esta pieza, por su propia contundencia creativa, a pesar de ya haberse tocado en temporadas anteriores, pero aun así persistía la incertidumbre. La cual amaino estas ansias maás no la certidumbre a pesar de los primeros trazos de la misma., hasta explotar en un cálido y agradecido aplauso.


Es de destacar que se nota el arduo trabajo para lograr la brillante interpretación que nos entregaron esa noche, cuatro voces muy bien ensambladas en conjunto, con una ejecución muy limpia, nítida y mesurada, al poder apreciar los acentos y fraseos precisos como marca ´tanto las partituras o su director.


Distinguiéndose cada parte solista o ese lúdico juego de tonalidades entre oboe y clarinete o, en su caso fagot y corno, éste último por cierto, un poco duduso su intervención como solista al notarse no muy nítido en su ejecución, así como en en momentos percibirse una orquesta acompañante algo cansada o falta de hálito.Aun así es congratulante el poder escuchar una hermosa experiencia estética musical que fue muy aplaudida´por el respetable que se dio en buena cita a este tradicional recinto como es el Teatro de la Paz.

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