Contemporaneidad con buen talante, presentó la Camerata de San Luis

Por: Roberto A. Valenciano Capín.

Indudablemente el Referirnos a la Camerata de San Luis bajo la dirección del Mtro. Julio de Santiago, es sinónimo del arriesgarse y comprometerse en compaginar lo tradicional con aquellos nuevos lenguajes que converge dentro del repertorio cameril.

Este fue el caso de la presentación de un interesante programa de esta cuarta temporada de conciertos. Al contar para esta sesión musical con la ejecución de dos piezas pocas veces tocadas y a la vez ser un estreno en estas tierras potosinas bajo el rubro de la entereza contemporánea; Arvo Part y Andre Jolivet.

Integraron el programa; Suite para cuerdas (1926) de Leos Janácek, Cantus in memoriam a Benjamín Britten (1977) de Arvo Part, Concierto para flauta y cuerdas(1950) de Andre Jolivet y finalizar con la Sinfonía Simple Op. 4 ( 1934) de Sir Benjamín Britten, al tener como escenario el lobby del Museo Francisco Cossío, otrora tiempo, la Casa de la Cultura.

Una de las constantes de esta agrupación cameril es la de ofrecer tanto sus integrantes; cursos de actualización, así como ofrecerles otra perspectiva profesional, en cuanto a la invitación tanto de músicos solistas como directores invitados, al decantarlo en conciertos para el deleite de los potosinos.

Dentro del renglón de músicos invitados, se tuvo por primera vez la participación del director huésped, el Mtro. José de Jesús Almanza Castillo y la solista, la flautista Laura Reyes.

Sin lugar a dudas le asentó muy bien, la dirección del Mtro. Almanza, al lograr con aplomo y una actitud para gestarlo en la fluidez de un sonido sostenido, lleno de matices y así como correr con apremio los riesgos que contrae estas composiciones que integran este interesante programa.

Es de destacar la obra del compositor francés, Andre Jolivet, interpretado por segunda vez en tierras mexicanas, bajo la excelente interpretación de la flautista queretana, Laura Reyes.

Una obra que se desarrolla bajo la pauta del desarrollo tonal y del virtuosismo, así como la utilización de voces en la flauta. Además se tuvo la oportunidad de disfrutar este bálsamo musical del compositor lituano, Arvo Part.

Un público que se dio en buena cita a este espacio cultural, el cual agradeció de este excelso concierto.

En la calma de un restaurante de un hotel de gran tradición, bajo la cordialidad del Chino González y el Mtro. Julio de Santiago, se tuvo una amena charla tanto con el Director huésped como su solista; el Mtro. José de Jesús Almanza y Laura Flores.

Respecto a los retos que conlleva el presentar este programa tanto para los músicos como su dirección, comento Mtro. Almanza: “Todo tipo de música conlleva retos y bueno en este caso el manejo del lenguaje tan nuevos como son los lenguajes del siglo XX que aún están todavía poco asimilados, el cual conlleva un reto en este sentido. Sin embargo, me encuentro con un grupo bastante colaborador en este sentido, pues esto hace mucho más fácil este trabajo y más llevadero”.

En cuanto a los retos que conlleva en el escucha este programa netamente contemporáneo presentado esta noche, asevero: ” Yo creo que poco se piensa en esto. Creo que al público tenemos ha ser prejuicios en este sentido. Creo que el público es muy perceptivo, no necesariamente tienen que conocer de música y nada de esto. Solo es llegar y tratar de sentarse y de recibir lo que un grupo como estos propone, y bueno, en este sentido, nunca cuando armo un programa estoy pensando si el público lo recibirá bien o no lo recibirá bien; creo que lo vimos ayer el público lo recibió de una manera extraordinaria a pesar de ser un lenguaje complicado y el público fue muy receptivo y bueno hay estuvo los aplausos”.

Un programa que tuvo el plus de presentarse obras contemporáneas pocas veces tocadas en nuestro país como son las piezas de Jolivet y Arvo Part: “ Creo que se conjuntaron varias cosas para conformar este programa; por un lado la invitación del director de la Camerata de San Luis que dirige el Mtro. Julio de Santiago, quien me proponía hacer un concierto muy fresco en el sentido de música nueva que no haya hecho antes la Camerata o, música nueva en el sentido de esa música que se toque poco en las salas de conciertos al menos en nuestro país”.

De ahí que emprendiera el Mtro. Almazán esa búsqueda, la cual coincidió con el trabajo que hacía conjuntamente con la flautista Laura Reyes sobre uno de los grandes conciertos del siglo veinte como es el concierto de Jolivet, “Coincide con que es una obra que se ha hecho una sola vez en Monterrey, esta sería su segunda vez; gracias a la complejidad tanto para el flautista como un grupo de cuerdas en abordar este tipo de repertorio”.

Por otro lado se encuentra la obra de Arvo Part, creo que se ha hecho poco, al cual tratamos de incluirla en el programa.

Si pudiésemos definir a estos cuatro compositores como paisajes, ¿Cómo serían estos?
“ Pues Janacke, definitivamente un paisaje que tiene que ver con el folklore y con esta región de Europa Central y un poco de Europa del Este, de los grandes paisajes checoslovacos, los grandes bosques. Jolivet, definitivamente con la pintura abstracta que se da entre el período de guerras. Quizás un Kandisky quien es el primero en dar el paso a la pintura abstracta y Arvo Part no sé que con que figura o conque, esta complicado y, Sir Benjamín Britten es una obra muy fresca, es un clásico de la música para este tipo de agrupaciones del siglo XX. Quizás lo asociaría con los pintores ingleses de esta época que se dirime en el Rafaelismo, quienes retoman y voltean la vista atrás para realizar una pintura al estilo de Rafael”.

A pregunta expresa del desinterés de las instituciones musicales en cuanto a la programación de compositores contemporáneos, comento; “Creo que puede ser por una cuestión de mercado. Hay que pagar los derechos y todo esto requiere de una mayor inversión para hacer un disco de este tipo, así como rentar las partituras y luego también el reto de los ejecutantes, vaya. Ayer escuchamos un concierto en donde veíamos a la flauta tocando con las cosas resueltas, esto lleva mucho, mucho tiempo trabajo detrás”.

De ahí que también se requiere de una gran inversión de tiempo para hacer música nueva y aunado a que es música muy complicada para poder ser asimilada.

Para Laura Flores fue contundente al declarar que “ Una orquesta no arriesga su status, sino más bien implica más retos tan difíciles como el programa planteada por la Camerata Potosina y el cual te lleva a romper tus propios límites, porque a veces te encierran en un tipo de repertorio, de ahí no salgo, porque no quiere otros niveles de dificultades que requiere meterse con uno mismo, con técnicas y conocer de otros estilos. De modo que no pienso que arriesguen su status de modo negativo sino más bien positivo, porque los van a llevar a crecer”.

Por su parte, la flautista queretana, nos platico entorno a la obra del compositor francés Andre Jolivet que interpreto en conjunción con la Camerata de San Luis, al coincidir que el año pasado interpreto otra obra de Jolivet; un concierto para flauta y piano, la cual tiene otra versión para cuarteto de cuerdas y arpa.

“Entonces ya conocía un poco sobre el estilo de Jolivet, quien tiene mucho repertorio para la flauta, el cual es un instrumento que le gustaba mucho. Jolivet se preocupo mucho por recuperar a la música y la cuestión ritual; la parte primitiva. El piensa que es la parte más humana y para esto utiliza otro tipo de armonía, así como varios métodos composicionales, al explorar mucho la tonalidad”

A pesar de ser gran admirador de A. Schoenberg, por cierto nos aclara la flautista no llego a escribir como él, pero finalmente se concibe de un lenguaje consolidado, donde se puede percibir la influencia de otras corrientes.

En cuanto a los retos y enseñanzas le ha dejado esta obra comento: “Pues retos de todo tipo, como lo fueron los pasajes lentos que se requieren de mucha musicalidad, aunque la armonía no es Re mayor o Re menor, si se requiere mucho con la afinación. Así como el adecuar el timbre de la orquesta en relación con la flauta, así como entrar el color de cada paisaje y el control de la respiración, de la digitación”.

¿Cómo definirías este concierto? “ Estaba pensando en esto hace unos algunos días y retomando todo lo que a él le gustaba mucho sobre el rito y la cultura griega; lo definiría como orgiástico, en el sentido que toda su música es de mucha actividad y mucha intensidad durante todo el tiempo, nunca para, parece que por fin ya tuvo un clímax y no, y otra y otra y otra. Pero pensando en los ritos que se hacían en honor del dios Dionisio, en las bacanales y todo esto. Además en este tipo de ritos se utilizaba el Aulos, que es un instrumento de viento-parecido a la flauta-, curiosamente a él le gusta la flauta y la utiliza en esta pieza dentro de un movimiento exarcebado”.

De ahí que abogo a que haya sido bien aceptado y disfrutado por los potosinos, porque acota la flautista “todavía tiene mucho que dar esta obra”.

Este programa fue presentado también en la Capilla de Aranzazu que se encuentra en el interior del Museo Regional Potosino.