domingo, 25 de diciembre de 2011

Ballet Folklórico de la UV festejó su 47 aniversario de diseminar su danzar


Por: Marcelo Sánchez Cruz

Al festejar su 47 aniversario, el Ballet Folklórico de la Universidad Veracruzana (UV), la agrupación artística demuestra su solidez y confirma que representa lo que el mundo debe ver de Veracruz, sostuvo la directora general del Área Académica de Artes de la UV, Guadalupe Barrientos López.

Durante la función de aniversario, llevada a cabo en el Teatro del Estado y en la que cual el ballet presentó el programa Disfrutando un fandango así como su nueva propuesta coreográfica para su programa emblemático Sones de Sotavento , la funcionaria universitaria dijo que la esencia del ballet es la de todos los veracruzanos.

"Luego del lamentable fallecimiento de Miguel Vélez Arceo, el Ballet inició una transición muy complicada y difícil, pero gracias al trabajo y compromiso de todos sus integrantes se están logrando excelentes resultados", aseguró.

Ángel Ciro Silvestre, director artístico del Ballet, explicó que los cambios realizados obedecen a la necesidad de adecuarse a los requerimientos escénicos actuales sin perder la identidad y propuesta coreográfica y de identidad folklórica que ha caracterizado al grupo.

"Tenemos una obra coreográfica reconocida a nivel nacional e internacional, pero la línea coreográfica de los ballets folklóricos ha cambiado; la modernidad hace que la gente pida espectáculos más movidos y llamativos; nuestra intención es lograr esto sin distorsionar la parte tradicional, que es nuestro sello", explicó.

En este sentido, sostuvo que el proceso por el cual se llegó a esta nueva propuesta escénica, empezó por hacer una selección de músicas y pasos que dinamizaran el montaje, para lo cual recurrieron a la experiencia heredada por Vélez Arceo.

"Aprovechando las variantes que el maestro Vélez Arceo hizo sobre el zapateado tradicional, agregamos algunas colocaciones para que resultara más atractivo; por ejemplo, si antes se hacía un zapateado con un solo paso en 32 tiempos, ahora se hacen 16 tiempos del paso original y 16 con una variante que puede ser en coreografía o con el paso modificado, lo que agiliza la propuesta en el escenario", aseveró.

Los cambios realizados no solamente se están dando en lo que se presenta en escena, explicó, sino que están planeados para mejorar los criterios de desempeño de la organización.

"Debemos modificar no sólo el repertorio sino también la técnica de los bailarines para poder pedirles más. Esto no quiere decir que vamos a cambiar la forma tradicional, no queremos hacer giros sobre puntas, ni levantar la pierna a noventa grados, lo que nos interesa es darle variedad, adecuar al ballet a los tiempos actuales", dijo.

Por su parte, Ángela María Pérez Salazar, integrante del ballet, afirmó que la dinámica de la agrupación ha variado para convertirse en un trabajo colegiado en el que cada integrante de la agrupación participa de manera activa, acorde a la nueva dinámica del Área Académica de Artes.

"El maestro Vélez dirigía todo: pasos, movimientos, alineaciones, lo cual era muy bueno porque le dio identidad al Ballet. Con la nueva dirección, se estructuró un trabajo en academias que aprovecha al máximo las bases sentadas por el maestro y plantea nuevas alternativas, lo que mantiene la esencia y agiliza la propuesta", aseguró.

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