lunes, 18 de noviembre de 2013

PALOMA HERRERA: “LA DANZA ES MI VIDA, Y SOY FELIZ CON LO QUE ELEGÍ”

 
 
La danza es, además, dedicación, es mucho tiempo de cada día, pero sobre todo es pasión. Y es imposible no ver esa pasión en Paloma Herrera cuando habla de este arte que eligió cuando tenía 7 años para el resto de su vida. Estará en Salta hasta hoy para completar tres días intensivos de capacitación a jóvenes bailarines.
 
En un impasse de su actividad, dialogó extensamente con El Tribuno en una charla que la muestra en la faceta no solo profesional sino como una mujer reflexiva y madura.   Su voz como sus movimientos son muy suaves, totalmente acordes a su arte.
 
 “Aunque le dedico todo a la danza, puedo balancear con mi vida personal. Mi familia fue el apoyo permanente a partir de mis 15 años, cuando decidí ir a estudiar y perfeccionarme a Nueva York. Sabían que era mi sueño, y si bien para los padres es muy difícil dejar que una hija adolescente se vaya tan lejos, me acompañaron en el proceso y cada año vuelvo para impregnarme de mis afectos”, repite.
 
Claro. Pasaron 22 años desde que se fue del país, pero nada erosionó la relación especial que mantiene con su familia, sus amigos y el público argentino. “Tengo una intensa carrera, pero siempre encuentro el tiempo para venir a la Argentina y también en Nueva York para hacer otras cosas. Creo que todos, aún con una vida muy especial, siempre podemos abrir un espacio para balancearla. En síntesis, aunque uno esté en una especie de burbuja, siempre hay que tener los pies sobre la tierra, valorar a los seres queridos y hacer las cosas que todos los días hace cualquier persona”.
 
Es que Paloma, cuando no está bailando, disfruta también como espectadora y no se priva de conciertos, del teatro y del cine, algunas de las muchas cosas que le gusta hacer. Para quienes viven del arte, en cualquiera de sus manifestaciones, vivir en la Gran Manzana abre un abanico de oportunidades que, en el caso de la bailarina argentina, no deja de aprovechar.
 
“A la ciudad le saco mucho provecho porque las opciones son interminables. Pero esa característica también la encuentro en Buenos Aires cada vez que vuelvo, porque la movida cultural en la ciudad y cada vez más en el resto del país, es asombrosa”, aclara.
 
El American Ballet Sobre las razones de su elección del American Ballet Theatre por sobre otros, Paloma aclara que eligió esa compañía porque soñaba con ser parte de ella, pero destaca la importancia de otras grandes del mundo como la Opera de París, el Royal Ballet de Londres o el Bolshói de Moscú.
 
“Hay muchas compañías que están en el primer nivel y hay que ser abierto para saber mirar y aprender de ellas. No se puede señalar una como la mejor del mundo. Esto es arte. Y en un contexto de excelencia, en la danza como en cualquier otra disciplina, habrá bailarines que te llegan más que otros. Su lugar hoy en el mundo: enseñar, aprender y disfrutar Paloma Herrera ratifica la satisfacción que le da el lugar en el que eligió estar, donde fue la más joven cuando llegó y en solo cuatro años se impuso como primera bailarina".
 
Hay que recordar que egresó del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón con las más altas calificaciones, recibió Diploma de Finalista en el XIV Concurso Internacional de Varna, Bulgaria, con sólo 14 años y un año después partió a los Estados Unidos.
 
“Para mí, el American Ballet es donde quise estar y fue un sueño hecho realidad entrar en el. Tengo la dicha de haber actuado como invitada en otras compañías, pero nunca sentí la necesidad de irme de lo que considero es mi casa y de mis maestros de plena confianza. Están los coreógrafos con los que armamos muchas producciones, hacemos todos los clásicos, innovaciones enriquecedoras y giras constantes. Es donde estoy feliz”.
 
Dar a través de la docencia Paloma Herrera completará hoy tres días de master class para bailarines avanzados, organizado por la Escuela de Danzas “Alexander Ananiev”. No solo es la primera vez que se hace este tipo de capacitación en el país con Paloma Herrera, sino que también es la primera vez que la bailarina viene a Salta.
 
“Yo he recibido y he visto tanto... trabajé tanto con mis maestros que me gratifica devolver eso a través de la enseñanza. Cuando te ubicás del lado del docente tomás conciencia de cuán difícil es el mundo de la danza y cuántos factores se tienen que combinar. Y allí ponés la mirada sobre los pocos que llegan. Soy conciente de eso, pero cuando lo miro desde otro lugar me asombra cada vez más”.
 
Paloma explica que experimentó con niños muy talentosos que lamentablemente no tuvieron la preparación más adecuada, u otros casos donde el talento queda eclipsado por el aburrimiento o la falta de motivación. Una combinación de aptitudes y actitud es la simbiosis perfecta para el progreso y crecimiento del bailarín, lo que habla a las claras de que no es tarea fácil.
 
Lo que se viene para 2014.
 
 Mientras aspira a seguir con la tarea de enseñanza, actividad que le ocupa los meses de verano en los Estados Unidos, Paloma anticipa un espectáculo para el año próximo en la Argentina. El emblemático Teatro Colón la tendrá en octubre con “Romeo y Julieta”, junto al ballet estable, en una confirmada actuación. Se trata de una megaproducción, con vestuario y escenografía totalmente renovado por el mismo teatro y coreografía de Kenneth MacMillan.
 
Cabe recordar que su última presentación en el país fue en 2011 con “El Corsario”. Ahora volverá con la inmortal obra de William Shakespeare llevada al ballet por el compositor ruso Serguéi Prokófiev que estrenó en 1938 en la ciudad checa de Brno.
 
De amores y distancia
 
No podía faltar la pregunta sobre el amor y la pareja. Se sorprende y lanza una carcajada generosa esquivando la respuesta, pero siembra la duda. Dice que es muy difícil sostener una relación cuando, como ella, se viaja mucho.
 
 “Mis parejas, increíblemente, siempre fueron argentinos, Alguien me preguntó cómo es posible que, tras 22 años en Nueva York, solo haya tenido novios de mi país. Es complicado. Mis experiencias personales han sido maravillosas y quizá, porque mis raíces tiran, esas parejas fueron de nuestro país. Lo importante es que ahora estoy emocionalmente muy bien”, cierra.
 
 
 

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