domingo, 27 de marzo de 2016

Intervención escénica "Mi Barrio" de Víctor Villasana toma el jardín de Tequis

 

Fotos: Cortesía de Claudia Vega
 
Por: Roberto A. Valenciano Capín
 
El intervenir  espacios tanto públicos como privados y  que estas tengan una particularidad, esta condición de abandono y por tanto,  sean  parte sustancial en la creación y fortalecimiento de una identidad comunitaria, es lo que propone el creador potosino, Víctor Villasana  y Líbranos del Mal Producciones a través del proyecto "Viandante".
 
Al trazar este ejercicio de intervención escénica en los siete barrios tradicionales que comprenden esta capital potosina, gracias a ser beneficiario del PECDA 2015. 
 
En este sexto ejercicio de esta intervención escénica se realizó en el Jardín de Tequisquiapan. A pesar de no cumplir las premisas antes citadas, al ser uno de los espacios mejor cuidados,  el detonador de ser está  fue la de generar no solo la atención de los que lo habitan y de no buscar esta historia lineal, sino más bien crear generar imágenes, generar sensaciones, generar otras formas distintas de apropiación y generar  estas diversas lecturas en el espectador no habituado a la danza desde otras miradas en esta tarde de Marzo.
 
El espacio-uno de los cuatros jardín que integran este espacio publico -.  Bajo el acompasado y pausado ritmo demarcado por un sordo tambor a un grupo integrantes  de la cofradía de dicho barrio ante la proximidad del viernes santo;  el transitar tanto de pequeño, adultos paseando a sus mascotas y algunos haciendo ejercicio, dan cuenta indirectamente de como Osvaldo Oviedo y Jesús Rocha iniciaron con la intervención física al trepar ambos a los árboles y a partir de la misma fueron generando no solo lo que su creador llama - composición efímera- ,  sustentada en esta arquitectura de movimiento a partir de esta resignificación corporal /espacial y por tanto  detonar acciones/situaciones que incidan en esta acción.
 
Sin más,  suspenderse en ellos, para crear esta interaccionan, el sentirse, el  pulsarse y hasta una posible simbiosis de ambas corporalidad, para generar este diálogo silencioso  que fue expandida gracias a esta misma proyección/refracción corporal en el espacio.
 

Para después dejar de suspenderse y trazar esta serie de movimientos fuertes en la tierra, al detonar no solo esta anonimidad a pesar de estas interesantes formas creadas, sino también incidir en este encuentro/desencuentro de estas señas inhibida de nuestra animalidad.
 
 Un ejercicio trazado con una narrativa sustanciada en un lenguaje contenido de movimientos pausados,  sostenidos, fuertes, sumamente expresivos y aunado a esta desbordante agresividad cotidiana que vivimos;   aun así, recurren conscientes o no a este encuentro/desencuentro, sino del reconocimiento de estas   posibilidades de convivir, de co/habitar el espacio por esta ruta de re significar el espacio a través de estos detonadores del movimiento hecho danza,  a partir de esta potencialidad de verse en la otredad a través de esta experiencia de lo visto y disfrutado, sin perder esta poética para acabar con esta momentánea placidez musicalidad, gracias a esta tan significativa "Acuarela potosina" como signo permanente de una identidad.
 

Víctor Villasana les hace una cordial invitación a la séptima y última instalación escénica que se realizara este 31 de Marzo en la explanada del Santuario de San Juan de Guadalupe a las 18:00 horas.

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