Por: Roberto A. Valenciano Capín
Una noche muy particular y de sorpresas, gracias al recital “Horizontes pianísticos en México: 1900-1950” a cargo del pianista mexicano de talla internacional Alejandro Barrañón, en la Sala de Conciertos del Área de Música del Centro de las Artes.
Al no quedarse solamente en un recital de piano, sino trascender en si mismo al tener el objetivo de rescatar el patrimonio artístico de obras mexicanas para piano compuestas en la primera mitad del siglo XX, y de esta manera "brindarle al público un panorama amplio y general del pianísmo en México en el periodo de 1900-1950. Esto a su vez pertenece a otro proyecto más amplio que se llama -Horizontes pianísticos en México: Siglo XIX y XX."
El cual tiene una duración de tres años, en su primera parte se enfoco en el siglo XIX, el segundo años estará enfocado en la mitad del Siglo XX y el tercer año la segunda mitad del Siglo XX. Un proyecto apoyado al ser beneficiario del programa Creadores Escénicos con trayectoria 2015-2017 del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.
Acota: "Es cronológico y se trata precisamente de recoger en acervos pocas obras conocidas o poco estudiadas, jamas publicadas de un pianísmo brillante, de grandes compositores de los cuales no se les ha conocido por alguna razón o no se les ha dado la importancia que merecen." comento el Doctor Alejandro Barrañón.
Y que de esta manera se une a una de las principales pautas de investigación sobre este período, realizada por una de las pianistas mexicanas de más prestigio, María Teresa Frenk, gracias a su muestra representativa de la música para piano mexicana titulada: El siglo XX en México. Antología pianística (1900-1950), publicados por Quindecim.
De esta manera, Barrañon se une a este hálito y en esta noche de otoño potosino ofreció las obras en su mayoría inéditas o pocas veces tocadas.
De esta manera, Barrañon se une a este hálito y en esta noche de otoño potosino ofreció las obras en su mayoría inéditas o pocas veces tocadas.
De entrada a este delicattesen musical con la -Tarantella- (1905) del compositor duranguense Ricardo Castro, - Canto de la Tarde-(1910) del compositor Gustavo E. Campa, una gran puntual seleccion del Ballet Xiuhtzitzquilo (La fiesta del Fuego de los Aztecas, 1925): Introducción, danza de las mujeres, lamento del pueblo y danza del fuego nuevo- de Antonio Gomezanda; Tercera Sonata (1928) de Carlos Chávez.
Para continuar con -Nocturno y Elegía del Ciclo Impresiones (1924) de José F. Vásquez, -Dos estudios (1935): para la segundas y para las quintas de José Rolón y finalizar este delicattesen musical con -Estudio(c.a.1940), - Intermezzo( c.a.1940) y Sonata jazz(1941) de Armando Montiel Olvera, a quien le dedico este concierto in memoriam.
En cuanto a su interpretación solo basta decir que provocó escuchar algunas aristas sonoras, tímbricas y formas compositivas sumamente interesantes, como lo fue las obras de Chávez, Rolón, José F. Vasquez y Antonio Gomezanda. Todo gracias a este depurada técnica y brillantez del obrero, que detenta su oficio, como nos platico en su momento, para redondear este delicattesen musical hecho en México de los que fuimos testigos y ser reconocido su trabajo con un cálido aplauso de un público que se dio en buena cita en este recinto cultural.
Alejandro Barrañón tiene la maestría en la Longy School of Music en Cambridge, Estados Unidos, y el doctorado en la Universidad de Houston.
Fue becario del desaparecido Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), del gobierno austriaco, del programa Fulbright-García Robles, así como del Programa de Mejoramiento del Profesorado.
Logró el primer lugar en los certámenes Hermilo Novelo, Jóvenes Solistas de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, Jóvenes Solistas de la Orquesta Sinfónica del Estado de México y Michel Block de la UNAM.
Se ha presentado en el Festival Internacional Cervantino, en diversas temporadas de la Foundation for Modern Music of Houston, la Bienal Internacional Music Since 1900 en la Hope University of Liverpool y el Festival Internacional de Música Contemporánea de La Habana y el Festival Internacional de Música Sinfónica de Argelia, entre otros.
Además de una antología de obras para piano solo de Carlos Chávez, su producción discográfica incluye dos discos con obras de cámara para violonchelo y piano con César Martinez Bourguet.
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